1Al iniciar la segunda década del siglo xxi, la coyuntura migratoria en México se caracteriza por agudas tensiones sociales y por iniciativas de Estado dominadas por la exclusión de la movilidad irregular. De un lado, incrementó sustancialmente la dimensión y complejidad de los flujos migrantes y de refugio en tránsito por y desde México; de otra parte, transcurrió un severo endurecimiento de las políticas migratorias, paralelas a una crisis humanitaria asociada con movilidades humanas en precarias condiciones. De entrada, puede afirmarse que la actual situación migratoria en México es la más crítica de todos los tiempos.
2El crudo panorama contrasta con las expectativas abiertas por el Gobierno del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador (AMLO). Es cierto que los procesos migratorios y de refugio no dependen enteramente de alguna política gubernamental, ni siquiera cuando se trata de procesos nacionales, menos todavía los originados en otros países. No obstante, en determinados momentos el discurso político de AMLO asumió que tenía capacidad para incidir sobre las dinámicas migratorias. Más aún, esa pretendida capacidad reguladora quedó plasmada en documentos oficiales que anunciaron objetivos de desarrollo y el control de los factores estructurales de emigración y refugio.
3El discurso político y gubernamental lo tomamos como referencia para elaborar un balance entre expectativas de política pública y, del otro lado, los procesos sociales migratorios. Como podrá apreciarse, el resultado refleja agudos contrastes entre política y realidad. Además, las disonancias están presentes incluso en el interior de la política pública, que llegó a contraponerse a sí misma al evolucionar de manera bipolar, como se mostrará posteriormente. Como ruta de análisis, el presente ensayo recupera el discurso electoral de AMLO previo a diciembre del 2018 y, de otro lado, la evolución de la política migratoria entre esa fecha y principios del 2023. Como exposición paralela, al tiempo se van revisando las principales tendencias migratorias de tránsito irregular a través y desde México.
4Mediante el encabezado anterior puede resumirse la movilidad migratoria de los años 2017, 2018 y 2019, considerando una geografía que integra al norte de Centroamérica a México y a los Estados Unidos. Durante el trienio, el flujo procedente de Guatemala, Honduras y El Salvador se convirtió en dominante, superando a la migración mexicana que durante décadas había sido mayoritaria entre los arribos irregulares a la frontera sur estadounidense. La cuestión centroamericana pasó a convertirse en asunto central para la política pública tanto en México como en Estados Unidos.
5Hasta el año 2011 y en décadas previas, la movilidad de mexicanos hacia Estados Unidos constituía la abrumadora mayoría del flujo regular e irregular. En aquel periodo, otras nacionalidades tenían números marginales o prácticamente inexistentes. La estadística de aprehensiones de extranjeros por la patrulla fronteriza de los Estados Unidos es buen indicador sobre la movilidad regional y su evolución, por lo cual será fuente para nuestro análisis.
- 1 La información de la Tabla 1 muestra claramente la evolución entre las nacionalidades que componía (...)
6Durante los años previos al 2011 predominó el flujo mexicano, cubriendo porcentajes que excedían al 90 por ciento del total de aprehensiones por la patrulla fronteriza de Estados Unidos (Tabla 1). Prácticamente se trataba de un asunto bilateral entre los dos países. A pesar de los números elevados, no configuraba una problemática particularmente tensa pues aportaba un flujo esencialmente laboral y además circular, con beneficios amplios para ambos países. La tendencia cambió sustancialmente entre los años 2011 y 2012, iniciando una nueva época debido a la irrupción del flujo centroamericano.1
7La movilidad desde Guatemala, El Salvador y Honduras duplicó su respectivo número entre 2011 y 2012, de manera simultánea en los tres países, abriendo un periodo expansivo que ha perdurado más de una década. La “cuestión migratoria” se convirtió así en “cuestión centroamericana”, considerando que paralelamente el flujo de mexicanos declinó a partir del año 2008. Sin haberse detenido por completo, la movilidad mexicana pareció alcanzar un periodo de estabilidad, con cifras mínimas en comparación con su trayectoria de décadas previas.
8Coincidieron entonces dos procesos: uno declinante, originario de México, y otro expansivo procedente del norte de Centroamérica. Sobre el último, es fundamental notar una sincronía que habitualmente damos por descontada: la expansión migratoria desde los tres países del norte de Centroamérica, como muestran los datos del año 2012 (Tabla 1). Es evidente que Guatemala, Honduras y El Salvador son naciones distintas, hermanadas por múltiples raíces sociales, culturales y económicas, pero al final con estructuras que configuran a sociedades, economías y naciones independientes. ¿Cuáles fueron entonces los factores comunes que determinaron un aceleramiento migratorio, simultáneo?
9Haremos un apunte al respecto, considerando que se trata de factores que tienen por característica: a) un potente impacto estructural sobre la sociedad y economía centroamericana; b) una presencia espacial amplia, que determina su efecto sincrónico en tres países; c) su repercusión como factor de expulsión de población; y d) la continuidad de su impacto por años, con consecuencias de largo tiempo.
- 2 CEPAL, 2011, Resumen regional del impacto de la depresión tropical 12-E en Centroamérica. Cuantifi (...)
- 3 Noticias ONU, “PMA responde a emergencia en Centroamérica” [en línea], 2 de noviembre de 2011. Dis (...)
10Un evento que cumple con las características anteriores es de naturaleza ambiental, con alcances de desastre. El año 2011 fue crítico para la región centroamericana debido a huracanes, tormentas y eventos similares. La CEPAL realizó un rápido balance sobre la principal crisis climatológica de ese año, que fue devastadora (depresión tropical 12-E). Se estimó que la población directamente afectada en Guatemala fue de 255 mil personas; en Honduras, 725 mil; en El Salvador 1.4 millones, además de otras poblaciones en Nicaragua.2 Ante la gravedad de la situación, varios organismos de Naciones Unidas intervinieron para atender la emergencia.3
- 4 Cf. las estadísticas y reportes de la Encuesta sobre Migración en la Frontera Sur de México (dispo (...)
11En condiciones de sociedades subdesarrolladas, los desastres climatológicos se convierten en poderosos factores disruptivos y críticos para la vida de las poblaciones, especialmente para las más vulnerables socialmente. Se comprende que las viviendas precarias enfrenten un desafío inmenso para sostenerse en pie; que las parcelas del campo y las cosechas tengan daños irreparables; que los caminos se conviertan en surcos intransitables; que el acceso a los precarios servicios de salud sean limitados o suprimidos; que la economía se paralice y el empleo e ingreso de las familias se reduzcan o se vuelvan imposibles; que la alimentación se convierta en un reto cotidiano; y así sucesivamente, entre otras crudas consecuencias. La tormenta fue el detonante que cerró horizontes de futuro para miles de personas que debieron emigrar como alternativa de vida. La emigración centroamericana repuntó en números mayores, particularmente su población joven y masculina.4
12La estadística de la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos describe claramente el quiebre social en Centroamérica. Las aprehensiones de guatemaltecos en el 2011 fueron 17 mil eventos, mientras que en 2012 ascendieron a 34 mil; las de hondureños, de 11 mil pasaron a 30 mil; de salvadoreños el salto fue de 10 mil a 22 mil. A partir de entonces el flujo siguió creciendo de forma imparable.
13Hacia el año 2019, las aprehensiones de hondureños en la frontera sur de Estados Unidos fueron 254 mil, superando muchas veces la cifra de 2011. Lo mismo sucedió con las detenciones de guatemaltecos, que alcanzaron los 264 mil eventos; el registro de salvadoreños fue de 89 mil en el mismo año. Por su parte, el flujo de mexicanos, si bien importante (166 mil) parecía menor en el contexto y muy inferior a años previos, como en 2008 cuando se registraron 800 mil aprehensiones por la patrulla fronteriza.
14Por consecuencia, la cuestión migratoria en la región giró completamente hasta convertirse en “cuestión centroamericana” casi por completo. El efecto paralelo fue posicionar a la migración mexicana en un lugar secundario en la práctica y en las relaciones de México con Estados Unidos. Así estaba el horizonte de los años 2017 y 2018, cuando se definía en México la elección presidencial en julio del 2018.
- 5 Cf. Morena, 2018, Proyecto Alternativo de Nación 2018-2024: Plataforma Electoral y Programa de Gob (...)
15De manera formal, los partidos políticos que en México compitieron en la elección presidencial del 2018 registraron ante la autoridad electoral su programa de gobierno. Así hizo el partido Movimiento Regeneración Nacional (MORENA) que postuló a Andrés Manuel López Obrador. Siendo así, el documento Proyecto Alternativo de Nación 2018-2024. Plataforma Electoral y Programa de Gobierno debió reflejar los lineamientos centrales del actual Gobierno y sus prioridades de agenda.5
- 6 Es pertinente recordar que AMLO fue también candidato a la presidencia de México en las elecciones (...)
16Resulta paradójico que entre las materias del programa no se encuentre referencia a la migración, salvo una mínima palabra relacionada con la pobreza; tampoco existe referencia a elementos paralelos, como las remesas familiares o sobre los consulados mexicanos en el extranjero. Tampoco existe mención a las fronteras norte o sur mexicanas, que evidentemente están articuladas con las dinámicas migratorias. Es decir, la migración, sus procesos y la política en la materia no figuraron para la propuesta de gobierno, a pesar de ser rubro esencial de la historia de México, del desarrollo nacional y de las relaciones con Estados Unidos y Centroamérica.6
- 7 La campaña electoral de Donald Trump tuvo como eje el ataque a la inmigración y especialmente cont (...)
- 8 Por ejemplo, cf. Sitio Oficial de Andrés Manuel López Obrador, 12 de noviembre de 2016, “EPN debe (...)
- 9 Cf. idem, 20 de enero de 2018, “Presenta AMLO Plan de Acción para defender los derechos humanos de (...)
17Para MORENA, la cuestión migratoria surgió de un escenario ajeno a los documentos formales del proceso electoral. La relación del actual presidente mexicano con la problemática fue motivada por las iniciativas antiinmigrantes (antimexicanas) y xenófobas de Donald Trump como candidato y después como presidente de Estados Unidos.7 Es decir, para AMLO el tema fue una reacción al debate político del país vecino y, al mismo tiempo, una oportunidad para cuestionar al presidente mexicano de entonces, Enrique Peña Nieto.8 Entre 2017 y principios del año 2018, en la comunicación de AMLO predominó un formato que relacionaba a la migración mexicana con las posiciones de Trump y de Peña Nieto; y no una perspectiva que asumiera a la migración en sí misma, en cuanto proceso social de amplia escala y estratégico para el desarrollo nacional. De este periodo, por ejemplo, surgieron ideas como convertir a los consulados mexicanos en los Estados Unidos en “procuradurías de defensa de los migrantes”,9 lo que posteriormente terminó sin repercusiones prácticas.
18En un segundo momento, el discurso antiinmigrante de Trump fue también el factor que relacionó a AMLO con la migración centroamericana, como había sucedido con la mexicana. Antes de que hubiese movilidad desde Centroamérica mediante “caravanas”, las redes sociales de Trump ya las referían [Bernal, 2018]. Le servían para justificar su política xenófoba que pretendía cerrar Estados Unidos a la inmigración y el refugio. Las “caravanas” fueron un importante recurso publicitario; cuando adquirieron dimensiones notables resultaron funcionales para presentar a la migración como amenaza contra Estados Unidos, como invasión extranjera y como materia de seguridad nacional, según su argumento [Smith, 2018]. Además, fue evidente su manipulación como elemento central de estrategia electoral [Azam, Rogers & Ernst, 2018].
- 10 Presidencia de la República, “Mensaje del Presidente Enrique Peña Nieto en torno a la caravana de (...)
19En octubre de 2018 ingresó por la frontera sur de México la primera gran caravana migrante, entre fuertes tensiones y riesgos de confrontación con la policía federal mexicana [Agren & García, 2018]. Ante la movilidad de miles de personas, el Gobierno mexicano tuvo como primera iniciativa instalar un amplio dispositivo de contención, pero debió ceder ante el numeroso grupo y ante la crítica interna e internacional.10
20Para ese momento, AMLO ya era presidente electo de México, aunque no en funciones todavía. La caravana de octubre fue particularmente importante para delinear las bases de la política migratoria de su gobierno, surgiendo un proyecto dual, contradictorio. El primer componente —ajeno al conocimiento público— fueron los acuerdos con el Gobierno de Estados Unidos que comprometían a México con las estrategias de Trump para frenar los flujos centroamericanos. El segundo componente fueron anuncios sobre iniciativas del Gobierno dirigidas a respetar los derechos humanos, a ofrecer refugio y empleos en México, así como promover el desarrollo del sur mexicano y del norte centroamericano para evitar la migración.
- 11 Sitio Oficial de Andrés Manuel López Obrador, “Gobierno electo procurará pleno respeto a los derec (...)
- 12 Presidencia de la República, “Conferencia de prensa del Presidente Andrés Manuel López Obrador, 21 (...)
- 13 Varias fuentes confirman los compromisos de Marcelo Ebrard con el Gobierno de Trump, antes de inic (...)
- 14 La descripción del programa migratorio acordado por Marcelo Ebrard se encuentra en Department of H (...)
21De hecho, al mismo tiempo que se anunciaba el compromiso de proteger derechos y promover el desarrollo, el futuro secretario mexicano de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, estaba acordando con Michael Pompeo (secretario de Estado del Gobierno de Trump) un programa que violentaba los derechos de solicitantes de refugio centroamericanos, conocido como “Quédate en México” que expulsó a miles de personas a ciudades fronterizas mexicanas.11 Estos acuerdos fueron siempre negados y públicamente presentados como iniciativas unilaterales del país vecino,12 a los que México accedía por razones humanitarias, no obstante que incumplieran con la legislación nacional. El Gobierno de Trump no tuvo inconveniente en mantener discreción sobre el acuerdo, con tal de que México formara parte de su estrategia antiinmigrante.13 Cabe destacar que hasta ese momento ningún Gobierno mexicano había asumido un giro tan sustancial de la política migratoria ni en las relaciones con los Estados Unidos en la materia.14 A partir de ese momento, México alteró el paradigma de las relaciones bilaterales y los principios que hasta entonces había mantenido la política migratoria.
- 15 Un análisis más extenso se encuentra en el documento del autor “Un paso adelante, tres atrás: La p (...)
22Antes de iniciar el gobierno de AMLO quedaron así trazadas dos rutas de política pública, no convergentes. De un lado, los acuerdos con Trump dedicados a la contención de migrantes y refugiados y, de otra, el discurso protector de derechos humanos y promoción del desarrollo. Cuando inició la administración, la primera ruta fue encabezada por la Secretaría de Relaciones Exteriores; la segunda, por la Secretaría de Gobernación, que progresivamente fue desplazada en la conducción de la política migratoria a pesar de que la ley le asigna esa responsabilidad.15
- 16 Dicho sea de paso, el Gobierno de Peña Nieto ofreció más resistencia a las presiones de Trump que (...)
23De este modo, desde la etapa electoral y a lo largo de su administración, la relación de AMLO con los procesos migratorios fue marcada por el Gobierno de los Estados Unidos. Primero, en su etapa como candidato, AMLO aprovechó la coyuntura xenófoba y racista de Trump para promover un discurso protector de los mexicanos y criticar al presidente Enrique Peña Nieto.16 Paralelamente, fue avanzando un progresivo alineamiento con las estrategias del Gobierno de Trump, transformando radicalmente la legislación, estructuras y prácticas de la política migratoria mexicana.
- 17 Desde su campaña presidencial, el tema central para Trump fue rechazar a migrantes y refugiados. E (...)
- 18 Cf. Fox News, “Mexican, US Top Officials Discuss Ways to Seal Border with Guatemala” [en línea], 2 (...)
24Para Estados Unidos y especialmente para la administración de Trump (enero 2017-enero 2021), los flujos de migrantes y refugiados se convirtieron en centro de la disputa política interna y, paralelamente, fueron concebidos como una problemática que debía resolver México.17 Las presiones sobre el Gobierno mexicano fueron continuas y de creciente escala, implementadas como asunto de seguridad nacional que ameritó incluso la intervención del Departamento de Defensa de los Estados Unidos, que envió representantes a la frontera de México con Guatemala para revisar el contexto migratorio en la región.18
- 19 Associated Press, “Trump to Mexico: Take Care of ´bad Hombres` or US Might” [en línea], 1 de febre (...)
25Las presiones tuvieron forma de amenazas directas de Trump contra el presidente mexicano Peña Nieto, abarcando una posible intervención militar, la obstaculización de los intercambios fronterizos o la cancelación del tratado comercial de América del Norte.19 Esto es, las presiones contra México no iniciaron con el Gobierno de AMLO y no fueron menos severas durante el periodo de Peña Nieto. La distinción entre las dos administraciones radica en la capacidad de negociación y en la disposición para resistir presiones. A pesar de su retórica nacionalista y contradiciendo sus planteamientos de campaña, AMLO terminó asumiendo una actitud condescendiente con las políticas migratorias de Estados Unidos.
- 20 Cf. la crónica del proyecto antiinmigrante de Trump en Hirschfeld & Shear [2019].
- 21 “For his part, Videgaray [Foreign Secretary] emphasized that it was a ‘legal impossibility’ for Me (...)
- 22 Cf. Amnesty International, “Possible Deportation Fund between USA and Mexico Is Shameful Business” (...)
26Al iniciar su administración, Trump implementó una amplia estrategia antiinmigrante que comprendía reformas legislativas y, sobre todo, barreras físicas y de control migratorio, asignando a México una responsabilidad directa para impedir flujos o recibir a centroamericanos expulsados por Estados Unidos.20 Sobre esa última propuesta, por ejemplo, durante el período de Peña Nieto los representantes del Gobierno mexicano fueron claros en rechazarla.21 Tampoco aceptaron la iniciativa de transferir dinero a México para financiar la deportación de extranjeros en situación irregular.22
- 23 “En recientes conversaciones a puerta cerrada, Estados Unidos y México están considerando declarar (...)
27La firmeza mexicana comenzó a debilitarse después de las elecciones presidenciales de julio de 2018. La discusión se centró en convertir a México en “tercer país seguro” para los solicitantes de refugio en Estados Unidos, lo que implicaba su proceso y protección en México.23 Entre agosto y noviembre del 2018 aparentemente hubo aceptación mexicana, pero no se formalizó ni se hizo pública, como describe un documento oficial de Estados Unidos relativo al tema [Washington & Mackey, 2019]. El resultado de estas primeras negociaciones fue el programa “Quédate en México”, como se indicó antes.
28Ahora bien, a pesar de la agresiva retórica de Trump, de la ampliación del muro fronterizo, de las amenazas xenófobas y de la implementación del programa “Quédate en México”, los flujos migrantes continuaron en ascenso, especialmente los procedentes de Centroamérica (cf. Tabla 1, años 2018 y 2019). Por esta razón incrementaron las presiones sobre el Gobierno de AMLO, incluyendo la amenaza inminente de imponer impuestos a las exportaciones mexicanas si el flujo no era contenido [Tan, 2019].
- 24 Incluso entre los senadores del Partido Republicano surgió una fuerte oposición a la posibilidad d (...)
- 25 Cf. VOA News, “Trump Claims Mystery Part of Mexico Immigration Deal” [en línea], 12 de junio de 20 (...)
29El Gobierno mexicano cedió plenamente ante la amenaza. A pesar que la medida tenía un abierto rechazo en Estados Unidos por todos los sectores económicos, gobiernos estatales y congresistas,24 la Secretaría de Relaciones Exteriores aceptó los términos del nuevo acuerdo que incluyeron la militarización del control migratorio, la evaluación del desempeño de ese control por los Estados Unidos y, en caso de incumplimiento, la aceptación por México de convertirse en “tercer país seguro” o algo parecido [Miroff, Sieff & Wagner, 2019]. Sobre el último punto, para el Gobierno de Trump se trataba de un objetivo central. Al final de las negociaciones sobre los aranceles, Trump estaba seguro de haberlo logrado mediante un acuerdo secreto.25 Todo indica que efectivamente el Gobierno mexicano había cedido esa posición, aceptada por el secretario Marcelo Ebrard, pero impedido finalmente por la embajadora mexicana ante Estados Unidos, Martha Bárcena [Morán Breña, 2023].
- 26 Cf. U.S. Departement of State, “U.S.-Mexico Joint Declaration” [en línea], 7 de junio de 2019. Dis (...)
- 27 Cf. Sitio Oficial de Andrés Manuel López Obrador, “Discurso de Andrés Manuel López Obrador, presid (...)
- 28 Cf. Latinus, “México dispuso de 28 mil soldados para apoyar mi plan de vigilancia de la frontera: (...)
30En todo caso, contemplando la compleja historia de las relaciones bilaterales, el acuerdo del 7 de junio de 201926 destaca entre los más humillantes que México haya asumido ante el vecino del norte. No obstante, a pesar de la crudeza del resultado, AMLO organizó una celebración nacionalista en Tijuana festinando haber evitado los impuestos a las exportaciones.27 Por su parte, Donald Trump no ha perdido oportunidad para burlarse públicamente de la forma como el Gobierno mexicano cedió ante sus amenazas.28
- 29 Cf. Forbes México, “Ebrard confirma que México desplegará 6,000 militares en su frontera sur” [en (...)
- 30 El autor ocupó el cargo de Comisionado del Instituto Nacional de Migración entre el 1 de diciembre (...)
- 31 Las funciones migratorias fueron las primeras de un proceso mucho más amplio de militarización de (...)
31La política migratoria mexicana se transformó radicalmente. Se desplegaron miles de efectivos de la Secretaría de la Defensa Nacional e incluso de la Secretaría de Marina en las fronteras sur y norte de México.29 La Guardia Nacional, organismo recién formado, integrado y controlado de facto por la SEDENA —no obstante que la ley enfatiza su naturaleza civil— empezó a ejercer funciones de control migratorio especialmente en la frontera sur. Adicionalmente, el Instituto Nacional de Migración cambió su administración30 y los cargos operativos principales fueron ocupados por personal del Ejército y de la Marina.31
32Cabe agregar que justo cuando en Washington se intentaba un arreglo para evitar los aranceles, en el Senado se daba forma a la Ley de la Guardia Nacional, que en su primera versión no establecía atribuciones de control migratorio para este organismo (20 de mayo del 2019). Una semana después, en su versión final, la Ley reconocía a la Guardia Nacional funciones de control migratorio (27 de mayo de 2019), las cuales aparecieron oportunamente en la coyuntura y, de esta manera, la Secretaría de Relaciones Exteriores pudo ofrecer un aparato militar para el control migratorio, como lo demandaba Trump. Es decir, días antes de los acuerdos del 7 de junio el Gobierno de AMLO estaba presto en la ruta militarizada.
- 32 Cf. CEPAL, 2019, Hacia un nuevo estilo de desarrollo. Plan de Desarrollo Integral: El Salvador-Gua (...)
- 33 Cf. la página web oficial: Secretaría de Bienestar, “Programa Sembrando Vida” [en línea], 6 de nov (...)
- 34 Cf. Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, 2020, Evaluación de Diseño (...)
33El modelo bicéfalo de la política migratoria de la administración de AMLO cortó entonces una de sus cabezas, la más débil y más publicitada: la ruta protectora de derechos humanos y promotora del desarrollo. De la bienvenida a la migración centroamericana, se giró bruscamente hacia el predominio de la Guardia Nacional y de las Fuerzas Armadas, además de un INM militarizado. Los anunciados planes de desarrollo del sur de México y norte de Centroamérica, que contaron con la colaboración de instituciones como CEPAL, terminaron en reportes sin uso.32 Por su lado, los programas “Sembrando Vida” (siembra de árboles) 33 y “Jóvenes Construyendo el Futuro” (becas), 34 que en el imaginario de AMLO servirían para contener a la migración mexicana y la centroamericana, de entrada carecieron del diseño adecuado para ese objetivo. Las estadísticas de los flujos migratorios demostraron la manifiesta desconexión entre ambos programas y los determinantes de la emigración, especialmente la mexicana que repuntó a partir de abril del 2020.
- 35 En términos generales, en lo correspondiente a su frontera sur, las autoridades migratorias de Est (...)
34A partir del segundo semestre del 2019, las políticas migratorias de Estados Unidos y México configuraron un obstáculo severo, pero no un freno para los procesos migratorios. La pandemia del COVID 19 y sus consecuencias sobre las estructuras económicas, sociales e institucionales provocaron el repunte de flujos en varias regiones del mundo. Lo que estaba en situación deteriorada en los países de origen con la pandemia se convirtió en crisis aguda y en impulsos a la búsqueda de alternativas de vida y refugio. Se explica así que entre enero del 2022 y enero del 2023 la patrulla fronteriza de Estados Unidos registrara la cifra más elevada en la historia de “encuentros” con extranjeros: 2.57 millones.35
- 36 Cf. U.S. Customs and Border Protection, “Nationwide Encounters” [en línea], 26 de enero de 2024, d (...)
35En el caso de México, la parálisis económica, los costos en salud, la pérdida de ingresos familiares y, no menos importante, la extensión de la violencia y el crimen en diferentes regiones, aceleraron la emigración hacia el norte. En enero de 2019, de 16 mil “encuentros” con mexicanos, la cifra creció hasta 80 mil en marzo de 2023. Actualmente, cerca del 40 por ciento del total de arribos a la frontera sur de Estados Unidos son personas mexicanas.36
36Sin tener antecedentes significativos, otras nacionalidades también ampliaron su movilidad hacia Estados Unidos: estas son Venezuela, Cuba y Nicaragua, modificando radicalmente al conjunto de la estructura previa. Cada una con cifras que llegaron a superar el total sumado del flujo de Guatemala, El Salvador y de Honduras, lo cual describe su extraordinario crecimiento, particularmente durante el segundo semestre del 2022.
Gráfica 1
Norte de CA = Guatemala, Honduras y El Salvador
Fuente: Elaborado con base en datos de U.S. Customs and Border Protection, “Nationwide Encounters” [en línea], 2024, disponible en: https://www.cbp.gov/newsroom/stats/nationwide-encounters
- 37 PBS NewsHour, “WATCH: DHS Secretary Mayorkas Outlines Biden’s New Restrictive Immigration Plan” [e (...)
37En un contexto de elevados flujos y ante el cercano término formal de la pandemia del Covid 19, que justificó la expulsión inmediata de extranjeros hacia México con el argumento de los contagios (aplicando el conocido “Título 42” del Código de Estados Unidos referente a salud), el Gobierno de J. Biden implantó un nuevo programa migratorio que inicialmente fue dirigido a venezolanos, pero que después se extendió a nicaragüenses, cubanos y haitianos.37 Por un lado, autorizó el ingreso a Estados Unidos de hasta 30 mil personas mensualmente de estas nacionalidades por razones humanitarias, mediante un procedimiento de vía remota, reuniendo requisitos como tener un patrocinador, así como cumplir otros de seguridad y salud. De otra parte, México aceptó recibir hasta 30 mil personas mensualmente de estas nacionalidades, rechazadas desde Estados Unidos debido a intentar solicitar refugio, intentar el cruce o haber ingresado por México o por Panamá de manera irregular. Las personas en alguna situación de las anteriores de entrada quedan fuera de toda posibilidad de ingreso regular o solicitud de refugio a los Estados Unidos, lo cual repercute sobre la amplia mayoría de la movilidad, cancelando drásticamente el derecho a solicitar asilo.
- 38 La experiencia más grave que demostró el deterioro de principios éticos y jurídicos de la política (...)
38La nueva estrategia migratoria —que podemos llamar el “muro blando de Biden”— resultó extraordinariamente eficaz para inhibir los flujos irregulares que arriban a los Estados Unidos. Las estadísticas de la patrulla fronteriza reflejaron reducciones excepcionales en los arribos de las nacionalidades mencionadas entre enero y febrero de 2023 (Gráfica 1). Siendo así, es probable que la nueva estrategia se aplique a otras nacionalidades, como pueden ser las centroamericanas. De este modo, el año 2023 avanza en perfilarse como un momento de importantes cambios en las políticas migratorias —más en sus formas, que en sus objetivos de contención— y en las dinámicas de movilidad en la región. Además, asunto fundamental: muestra la consolidación de México como parte condescendiente de iniciativas concebidas e implementadas bajo el interés dominante de los Estados Unidos, agregando un tono extremo de maltrato, de violación de derechos y de falso compromiso solidario con los pueblos latinoamericanos.38
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